Cuando un adolescente comete un delito, el sistema judicial no lo trata como a un adulto. Aquí entra el Derecho Penal de Adolescentes, que se enfoca en la reeducación y reinserción social, más que en el castigo puro. En este contexto especial, el Psicólogo Forense es una figura clave.
Este profesional no solo evalúa el delito en sí, sino, y más importante, quién es el adolescente, por qué actuó así, y qué necesita para cambiar su camino. Su trabajo es esencialmente predictivo y socioeducativo.
Las Funciones Esenciales del Psicólogo Forense
Valoración de la Madurez Psicológica y Capacidad de Culpabilidad
El perito debe determinar la capacidad del adolescente al momento del delito:
- Capacidad de Comprensión: ¿El joven tenía la madurez y la capacidad cognitiva para entender la gravedad y la ilegalidad de su acto? Esto es crucial, ya que un niño de 14 años no tiene la misma capacidad de discernimiento que uno de 17.
- Capacidad de Actuar: ¿Podría el adolescente controlar sus impulsos o su comportamiento, o existían factores psicológicos (como inmadurez, consumo de sustancias o trastornos) que limitaron su voluntad? Esta valoración ayuda a determinar si existen atenuantes o si se debe optar por una medida más enfocada en la salud mental.
Estudio de Factores Criminógenos y de Riesgo
Para prevenir la reincidencia, es necesario entender las causas profundas del comportamiento delictivo:
- Análisis del Entorno: El perito investiga factores familiares (violencia intrafamiliar, negligencia), sociales (amistades, bullying ) y educativos que influyeron en el delito.
- Factores Individuales: Se evalúan características como la impulsividad, la falta de control de la ira, el consumo problemático de alcohol o drogas, y la presencia de trastornos de conducta o de la personalidad que puedan explicar la desviación social.
- Evaluación de Riesgo de Reincidencia: Utilizando herramientas validadas, el psicólogo estima la probabilidad de que el adolescente cometa futuros delitos.
El Dictamen
- Sugerir la intervención más adecuada (libertad vigilada, internamiento, tratamiento ambulatorio, etc.)
- Proponer programas específicos (manejo de la ira, prevención de adicciones, desarrollo de habilidades sociales)
- Ayudar al joven a desarrollar competencias que le permitan reinsertarse exitosamente en la sociedad.
- Determinar si el adolescente debe estar alejado temporalmente del núcleo familiar, o si la familia debe recibir apoyo y orientación
- Asegurar que el entorno inmediato del joven favorezca su rehabilitación, no su reincidencia.
En resumen, el psicólogo forense es el experto que se asegura de que la justicia juvenil tenga una visión integral del ser humano detrás del delito, facilitando decisiones que realmente busquen la transformación y la segunda oportunidad para el adolescente.
